Stole my Heart Capitulo 33

CAPÍTULO 33

Llegue a casa sin quitar la sonrisa de la cara, todavía no se había despertado nadie, ni siquiera mis tíos. Fui a la habitación de mi padre para ver si estaba dormido, ni rastro de él, fui a la habitación de mi hermana Carol nada, no había nada, a la habitación de invitados y tampoco encontré nada. Vaya hoy no había ni dios, ni mis amigos ni mi familia. Cuando estaba en el cuarto de baño lavándome la cara oí el ruido de la cerradura y baje corriendo.

- Iñigo!- Grité y lo abrace fuerte, como si no quisiera que se volviera a ir.

- Que tal?

- Ya sabes, pero ya he empezado a salir.- Dije orgullosa de mi misma.

- Muy bien.- Dijo dándome un abrazo.

- Y tu que tal? Te has despejado?

- Pues bien, la verdad es que irme lejos de casa me a ayudado a despejarme, ya sabes.

- Me alegro, aquí las cosas han sido difíciles.

- Me lo imagino.

Nos sentamos en el sillón y hablamos durante horas, hasta que dieron las 5 de la tarde, y no habíamos comido nada.

- Y papa?

- No lo sé cuando vine no estaban.

- Como que estaban?

- O si es que han venido los tíos, con los monstruos ya sabes a traer a Carol y después se han quedado.

- Oh bueno pero les has llamado?

- Si y nadie coge.

- Que raro, bueno comemos?

- Claro!

Comimos lo que preparo Iñigo una simple tortilla de jamón y queso aunque estaba muy rica, las mejores tortillas que he comido en mi vida las hace mi hermano.

Tuvimos una charla bastante animada la verdad y los echaba de menos y me alegraba verle aquí otra vez y recuperado, aunque parezca mentira él estaba muy unido a mi madre y después del funeral cogió el coche y se fue sin decir nada.

Terminamos tarde, y recogimos la mesa y nos vimos una película abrazados, como en los viejos tiempos. Me quede dormida a la mitad de la película más o menos, porque me venció al no dormir a la noche.

Me desperté en mi habitación eran las 7 de la mañana, había dormido muchísimas horas, me levante y me duche y me vestí con unos shorts oscuros, una camiseta que me de los rollins stones que me encantaba y unas vans. Baje con un libro y me senté en el porche con una manta.

Era leer una frase y ya no existía nada más que la historia de la novela, no existía nada de la vida solo estábamos el libro y yo, me llevaba a un mundo ajeno al mio estaba a salvo de todo daño y muerte.

- Que haces hija?

- Leer, oye tu ayer donde te metiste?

- O perdón por no avisarte pero los tíos y yo no fuimos a un parque con los hios a que se divirtieran un poco, ya me he dado cuenta de que Iñigo a llegado.

- Si, es genial.

- Ya…

- Papa no seas duro con él, para él a sido muy difícil, y ya sabes como es, siempre se aleja de los problemas lo que importa es que haya vuelto, sano y salvo.

- Si tienes razón.- Se sentó a mi lado mirando al frente sin decir palabra, ninguno de los dos dijimos nada.

Apoye mi cabeza en su hombro, y nos quedamos mirando a un punto finco sin decir nada.

- Y que ay de ese chico que vino el otro día a casa?

- Quien?- Le pregunté haciéndome la tonta.

- Paula, ya sabes de lo que te hablo.- Reí por la respuesta tenía una cara de vergüenza, que tonto era.

- Pues es un buen amigo.

- Le quieres?

- Si, creo no lo sé es difícil la verdad, pero eso me da igual solo con tenerle cerca me vale, no pido más.

- Me alegro pequeña.- Me dio un beso en la frente.- Mira allí viene.

Le vi acercándose con una sonrisa, pero cuando vio a mi padre bajo la mirada avergonzado.

- Hola Paula, hola señor.- Dijo dándole la mano.

- Hola, bueno yo tengo que tener una charla contigo jovencito.- Dijo mi padre levantándose.- Esta mujer, es MIA- Dijo alzando la voz al decir la palabra mia.- Y como le hagas daño te arranco los sesos y los cuelgo en tu puerte me entiendes.- Con cada palabra que le decía mi padre ha Alex se le veía más nervioso y con miedo.

Me levante y le pegue en el hombro a mi padre.

- Bueno papa ya creo que ya has terminado de hacer el tonto anda metete en casa y hazme el desayuno anda.- Dije mientras le empujaba de la espalda para meterle en casa.

- Anda Alex quita esa cara de idiota que se te a quedado que pareces imbécil. – Dije sin parar de reír, él ni siquiera se movía estaba quieto pálido.

- Pero pero pero… Has oído lo que me ha dicho?- Dijo señalando hacia la puerta tartamudeando.

- Jajajajaja pero si a sido una broma, es que al pobre le falta alegría en la vida y se lo has puesto a huevo.

- Cállate a mi no me hace gracia.

- Dios pero que idiota eres.- Le dije dándole un beso en la mejilla. – Ahora que lo recuerdo porque no me cogiste el móvil ayer? E? donde estabas?

- Eeeee… tranquila, stop. Estaba… con mi familia comiendo y eso…- Dijo bajando la mirada, no me lo creí pero me callé, ya me lo diría alguna vez.

- A bien, y que tal?

- Pues como siempre aburrido, ya sabes.

- A, bien.

Nos quedamos en silencio bastante incomodo la verdad, asique quería romperlo.

- Que hacemos hoy?

- Hoy no puedo quedar la verdad, tengo que quedarme con mi primo de 7 meses.

- Oh, vale.

Me sentía bastante mal, no tenía tiempo para mi es lo que a mi me parecía, y lo echaba de menos. Supongo que era lo que tocaba, y que hacia mucho que no salía de fiesta y no estaba con mis amigas asique decidí que saldría con ellas esa tarde.

- Bueno me tengo que ir.- Me dijo un tanto seco.

- Bien, llámame si eso.

Me dio un beso en la frente y se marcho. Un beso en la frente ni que fuera mi padre. Me fui bastante cabreada a mi habitación sin saludar a mis tíos que ya habían bajado. Deje la manta y el libro encima de mi cama y baje a desayunar, al estar leyendo, hablando con mi padre, y Alex me dieron las 12 de la mañana.

Durante todo el desayune estuve callada, en mi mundo por así decirlo y no escuchaba lo que decían.

- Paula, los tíos se van dentro de poco después de comer y los niños quieren pasar contigo la mañana sabes? Que te parece quedarte con ellos?

- Oh bien, no pasa nada, claro no hay problema.

Y me sumergí otra vez en mi mundo.

Después de desayunar recogimos todo, y salí con los monstruos a la calle, después de coger el libro, el móvil, el bolso y una chamarra vaquera. Decidí llevarles al parque para que se divirtieran con otros niños. Yo me senté en el banco a mirar y pensar mientras ellos jugaban.

- Paula, paula.

- Que quieres Camille?

- Empújanos en los columpios, Paula, porfavooooor.- Decía poniendo pucheritos y dando pequeños saltitos que hacían que sus rizitos rubios se le moviesen.

- Sabes que eres un bicho no? – Le dije mientras le hacía cosquillas.

Fui a empujarles en los columpios, hasta que se cansaron del parque y les lleve hasta un lago. Me tumbe en la hierba mientras los trillizos jugaban y Carol estaba jugando con mi pelo.

- Que tal ayer en el parque, Noel?

- Que parque?

- Si la que fuisteis ayer con los papas y el tío.

- Paula no fuimos a ningún parque.- Respondió Pierre sin parar de hacer el tonto con el balón.

- Y donde os fuisteis?

- No sé, era un edifició.

- Que bien! Y que hicisteis cariño?

- Nada, era muy aburrido, no nos pudimos bajar del cochecito.- Dijo poniendo pucheritos.

- Ya! Fue aburrido, no quiero volver.- Se quejo Camille.

Tras esa conversación nos fuimos derechos a casa, esto ya era pasarse, mi padre me miente, y Alex esta siempre ocupado, ninguno de mis amigos me cogió ayer el teléfono.

Al llegar a casa lo primero que hice fue llamar a Ana para quedar.

- Ana?

- Si quien es?

- Soy Paula.

- O Paula, que sorpresa no me esperaba que me llamaras.

- Perdón por no estar con vosotras, estaba ocupada.

- Hombre, tranquila cielo no pasa nada, que tal?

- Bien bien, y tu?

- Muy bien, hoy saldremos las amigas de fiesta te apuntas?

- Por eso te llamaba, a que hora?

- A las 8 en el parque central.

- Allí estaré, adiós amor.

- Adiós Paula.

No me había dado cuenta de que me había olvidado de mis amigas, y me sentía mal. Tocaron la puerta, y da allí entro mi tía, con una sonrisa.

- Hola tía que pasa?

- Hija, que nos vamos ya.

- Pero no os ibais a la tarde?

- No es que el avión sale antes y tenemos que darnos prisa.

- A vale.- Me acerque y la abracé con fuerza y me dio dos besos.

- Ayuda a tu padre e.- Dijo agarrándome la mano derecha.

- Descuida tía.

Baje al salón y me despedí de todos.

- Bueno adiós bichos!- Dije abrazando a los tres monstruos que tenía de primos.

- Paula nos ahogas.- Se quejaron, y todos empezaron a reír.

- Bueno bichos hasta pronto, adiós tíos espero que nos veamos pronto.

- Paula come sin mi llegaré tarde.- Me dijo mi padre.

Subí a mi habitación puse música y me tumbe en la cama. Os parecerá egoísta pero cuando más necesitaba a gente a mi lado más se alejaban, mi padre no estaba mi hermano se había ido a buscar trabajo y mis amigos… Bueno ni siquiera sabía donde estaban, Miguel, Sara, ni Junh me cogían el teléfono. Me frustaba muchísimo y hasta me enfadaba pero no quería decir nada solo quería esperar a que ellos me dijeran algo, no les presionaría pero no me olía nada bien eso.

Alguien llamo a la puerta y se asomo a la habitación, mientras que hizo que mi corazón volcara del miedo.

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LO SIENTO, LO SIENTO, LO SIENTO YA SÉ QUE ES ABURRIDO CUTRE Y TODO LO QUE QUERAÍS PERO OS PROMETO QUE LOS SIGUIENTES CAPÍTULOS SERÁN MÁS INTERESANTES. ESPERO QUE SIGAIS LEYENDO Y ESCRIBIENDO COMENTARIOS PORQUE ME ANIMAN MUCHISIMOO! OS AGRADEZCO QUE OS MOLESTEIS EN AHCERLO PORQUE SIGNIFICA MUCHO PARA MI :) OS QUEIROOOW