domingo, 22 de enero de 2012

Stole my Heart

CAPÍTULO 4

Me desperté entre las sabanas, por los gritos de Carol. Me levante para que se callara, la cogí en brazos y la tranquilice. Cuando se callo la vestí la deje encima de la cama, para que me vistiera yo, encendí la televisión y puse otra vez los dibujos del día anterior. Cogí un vestido, ya que parecía que hacía mucho calor, me puse unos zapatos, me arregle el pelo, me maquille ligeramente y bajamos las dos a la sala para desayunar. Estaban ay toda la familia desayunando, cuando llegue le di a mi madre a Carol y fui a por el desayuno. Como había muchas cosas, cogí un cola -cao unas galletas y mantequilla. Cuando yo solo estaba empezando toda mi familia se levanto para marcharse excepto mi madre que le estaba dando de comer a mi hermana. Le comenté que iba con un amigo de paseo.

- Pero Paula y si os perdeís?.- Mi madre tenía la facilidad de ver todo lo malo en todo.

- Mama, tranquila no va a pasar nada, llevaremos un mapa, y encima no nos vamos a ir lejos te lo prometo. Y te llamo si pasa algo.- La tranquilice acariciando su mano.

- Bueno bale, pero quien es el chico?- me preguntó con curiosidad.

Yo miré a los alrededores y su mirada y la mía se cruzaron, los dos sonreímos como tontos y mi mí madre miró a la dirección a la que miraba yo. Y él la saludo haciendo un gesto con la mano.

- O es muy guapo Paula.- Me dijo sorprendida, y riendo.

Aparte la mirada de él, y mire a mi madre que estaba muy ilusionada y se acababa de levantar.

- Bueno te dejo, que te vaya bien cielo.- Me dijo mientras me acariciaba la mejilla, y me daba un beso ligero.

Cuando mi madre no estaba en la sala, se levantó y se sentó delante de mí.

- Hoy estás muy guapa, con la ropa seca. – Me dijo riendo.

- Que gracioso, tu tampoco estas mal con camiseta.- Le dije bromeando, aunque más que eso parecía una indirecta total.

- Bueno nos vamos?- Me sugirió.

- Claro.

Salimos del hotel a paso rápido, yo no sabia a donde íbamos pero me dejaba llevar, pero al final la intriga pudo con migo.

- Imanol,- Le agarre del brazo parándolo.- A donde vamos?- Le pregunte todavía sin soltarle, en contacto con el me sentía segura, encantada.

- Es una sorpresa confía en mi.- Me guiño el ojo y siguió andando, pero sin soltarle el brazo.

Mientras andábamos los dos estábamos en silencio y al final con ese silencio incomodo le solté el brazo. Él lo noto y me miro con cara de perrito degollado.

- Porque lo as echo.- Me pregunto mirando mi mano.

Yo sin decir nada, cogí su mano y le agarre con fuerza. El seguía mirando nuestras manos, y lo mire con una sonrisa agradable, y el me correspondió con uno igual.

Después de andar, y andar durante mucho tiempo mientras hablábamos de cada uno, llegamos a una heladería.

- Paula quieres uno?

- Si estaría bien.- Le dije sonriendo.

- De que quieres?

- Bueno pues… Estaría bien uno de chocolate y vainilla.

- Bien.- Después de sonreír, entró en la tienda y pidió uno para el de estrachatela. Volvió pronto al lado mio, cuando no estaba por poco que fuera el tiempo se me hacia eterno.

- Aquí tienes tu helado, bella.- Me dijo sonriendo de oreja a oreja, esa sonrisa que me enamoraba.

Seguimos andando viendo calles preciosas, hasta que llegamos a una plaza que tenia muchos puestos de caricaturas.

- Hacemos uno juntos?- Le sugerí.

- O si, que bien.

Durante cinco minutos estuvimos quietos, hasta que el pintor terminó. Era precioso, aparecíamos dentro de un corazón, seguramente el pintor pensaría algo que no era, pero oye solo de pensarlo me parecía genial. Me sonroje solo de pensarlo.

- Esta bien no?- Me pregunto riendo mientras miraba el dibujo.

- Si, es muy divertida.- Le respondí uniéndome a su risa.

Seguimos andando, yo claro no sabía a donde íbamos y llegamos a otra plaza gigante, me sorprendió, sabía a donde íbamos y entonces la curiosidad me pudo.

- Bueno y tu como sabes tanto?- Le pregunte al final.

- A es que había venido aquí antes.- Me respondió mirando a la plaza con una sonrisa.

- A ahora lo entiendo. –Reí.

Nos sentamos en las escaleras de la plaza mientras hablábamos, de nosotros, él me contaba algo y luego me preguntaba otra cosa, y así sucesivamente. Luego nos levantamos y entramos a una tienda, que todo era muy barato, estuvimos mirando y riéndonos de las cosas que vendían. Salimos de esa tienda sin comprar nada, y seguimos andando hacia el sur.

Después de andar mucho, nos encontramos con una playa y nos tumbamos en la arena ya que no llevábamos toallas. Estuvimos ay tumbados sin decir nada, hasta que él me abrazó por la cintura, acercándome hacía él. Y yo hice lo mismo le abracé y apolle mi cabeza en su pecho, en ese momento me sentía llena, encantada, impresionantemente feliz. Pasaron las horas y vi como por detrás pasaba una pareja en bicicleta, y no era la primera vez que lo veía. Y tuve una idea.

- Ei parece que por aquí creo que alquilan bicicletas, porque no lo alquilamos nosotros?

- Es una buena idea, claro que si.

No levantamos recogimos todo y andamos por la acera un busca de la tienda de alquiler.

Después de poco tiempo lo encontramos.

- Bueno querríamos una bicicleta. Cuanto seria?- Preguntó mi hermoso compañero.

- Bueno uno? – Hico un gesto mirándome a mi, pero Imanol le hico un gesto con diciendo que si.- Bueno pues serian 10 euros, 30 minutos, una hora 20 y dos 25 euros.

- Pues quisiéramos una hora por favor.- Le respondió ofreciéndole el billete de 20 euros, el hombre la cogió y nos enseño la bici que por una hora sería nuestra.

La cogimos y nos fuimos yo sentada en la silla de detrás y el de pie pedaleando. Yo me agarraba a su cintura, de echo ni siquiera era por miedo solo por sentirlo en mis manos.

Seguimos andando hasta que la playa se termino y paró para descansar nos sentamos en un banco. Me agarró la mano me miró a los ojos con intensidad.

- Bueno Paula hoy me lo e pasado genial, de veras hace mucho que no me lo pasaba tan bien con alguien.

- Imanol- Cogí su rostro en mis manos mirándole a los ojos.-Yo también me lo e asado genial, muy muy bien.

- Te quería decir una cosa… es difícil para mi pero estas empezando a gustarme.- Me miro con una mirada de inseguridad.

Y para cuando me di cuenta su cara estaba muy cerca de la mía, y de repente sus labios se posaron fuertes de los míos, pero al mismo tiempo con dulzura. Después de eso yo no podía respirar y sus labios se separaron de los míos despacio. Y me llevo a la parte delantera de la bicicleta al manillar y nos fuimos hacía la playa.

2 comentarios:

  1. ahhh que monos los dos! Me muero por dentro de amor! Existe uno igual que Imanol en la realidad? Porque todavía no lo he encontrado...Lo haces muy bien...espero el siguiente! Si quieres avisame por twitter...mi twitter es @andrea_saynever!
    Besitos.

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  2. Jajajaja En la realidaad? Buuff.. ya me gustaria a mi cruzarme algun dia con alguien asi.. jajaja Graciaas:D
    Aora te sigo Besooos:P

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