Stole My Heart Capítulo 38

CAPÍTULO 38

Bajé entusiasmada las escaleras con mi cámara a mano.

Sacamos fotos haciendo el tonto, y no paramos de reír salimos al jardín trasero, allí estábamos los dos en la hamaca mirando las estrellas envueltos en aquella maravillosa noche cálida.

-      ¿Sabes?

-      ¿Que?

-      Que todavía faltan dos semanas para que acabe el verano.

-      ¿y?

-      Que nos podemos largar de aquí los dos, no sé dos días o así.

-      Buena idea, pero ¿a donde?

-      Francia.

-      ¿Francia?- Me preguntó desconcertado.

-      Si, tengo familia y más de una vez me han comentado que tienen una casa que me la pueden prestar, para unos días.

-      Es que la verdad no se si puedo soportarte dos días enteros.

-      No puedes vivir sin mí, acéptalo de una vez.

-      No, te prometí que nunca te mentiría.

-      Eso es mentira.

-      Bueno es verdad no podría vivir sin ti y…- Y entonces sonó el teléfono.

Me levanté y fui a coger el teléfono.

-      ¿Si?

-      Hola vida, llegaré a la hora de comer, mañana.

-      Vale, pero ¿Dónde estas?

-      Hija, te tengo que colgar adiós te quiero.

-      Y yo.

Y entonces colgó

 Me estaba pareciendo muy raro tanto misterio, la verdad llevaba con ese misterio varios días, pero nunca respondía a mis preguntas y me estaba empezando a enfadar.

Volví al jardín y me tumbe junto Alex.

-      ¿Bueno por donde ibas? A si! Que no puedes vivir sin mí, que darías la vida por mí…

-      Yo lo segundo no lo he dicho!- Dijo abalanzándose sobre mí y echándome de la hamaca.

Rodamos bastante por el jardín mientras yo gritaba y reía al mismo tiempo, él me hacía cosquillas. Cuando conseguí zafarme, escapé dentro de casa cerré la puerta y me escondí en el armario que había debajo de las escaleras. Oía sus pisadas pasando por el armario y deje de respirar abrí la puerta y me abalancé sobre él.

-      ¿Te rindes?- Dije agarrando sus dos manos y poniéndolas detrás de su espalda.

-      Si si si si si, sueltamé por favor.- Decía en forma de suplica.

-      Si pero me tienes que rendirte en la apuesta de los besos.

-       Eso no te lo crees ni tú.

-      A no? Vale, ya verás.

Empecé a darle mordiscos por tu el cuerpo, hasta que el timbre nos interrumpió, mi padre no podía ser así que fui a ver quien era.

-      Sara! Miguel! Junh! Que haceís aquí?

Mientras entraban ví que Miguel tenía un cachorrito en sus manos, un Golden precioso. Fui corriendo a cogerlo.

-      Pero que monada! Te lo has comprado?- Empezó a reírse.

-      No es para ti.

-      No…no sii?- Empecé a dar vueltas con el cachorrito en manos.- Gracias, gracias, gracias, gracias!- Dije dándole besos en la mejilla.

-      Bueno en realidad es regalo de todos nosotros.- Dije Miguel riéndose, por mi reacción.

-      Pero que?- Fui corriendo a abrazar a las dos chicas y dándoles besos a ellas también.

Cuando pare todos nos sentamos en el salón.

-      Bueno y me quereís explicar porque?

-      Bueno, no sé, pensábamos que te gustaría, no tiene que haber una razón para hacer regalos, simplemente nos apetecía verte feliz.- Yo empecé a llorar de felicidad, de amor, de de agradecer por tener unos amigos tan buenos, y tan considerados.

-      Gracias en serio, os quiero mucho, mucho! – Dije abrazándolos a todos otra vez.

Nos quedamos a dormir todos en casa en el salón, nos colchones en el suelo, y cenando pizza, y con mi perro, mi precioso perro.

Bueno como veis se me están agotando las ideas para esta novela y yo creo que ya tiene que llegar a su fin, no sé cuantos capítulos más lo voy a alargar, pero no serán más de cinco, lo siento, pero ya tengo ideas para el siguiente y creo que serán mucho mejores, ( espero) Bueno espero que os guste, comentad porfa :) Os quierooo!